La construcción de los muros en el río Coca se iniciará este viernes 17 de julio.

Este viernes 17 de julio del 2020 está previsto que se inicie la construcción de los muros con material rocoso para reducir la velocidad de la erosión que afecta al río Coca, informó la Corporación Eléctrica del Ecuador (Celec). Los trabajos tienen como finalidad proteger varias obras de infraestructura estratégica, que se encuentran ubicadas a un costado de este afluente. Entre estas un tramo de la vía Baeza-Lago Agrio, tubería para transportar petróleo, las obras de captación de la central Coca-Codo Sinclair. Además, de las poblaciones aledañas. Para realizar esta intervención, personal de la empresa pública Petroecuador ha removido con la ayuda de maquinarias piedras que tienen un peso de más de una tonelada, en el sector de Piedra Fina. El propósito es colocar estas rocas de forma transversal sobre el lecho del río. “Se trata de piedra volcánica, arrastrada por las erupciones del Reventador; con este material se construirán muros”, explicó José Morocho, técnico de la Unidad de Negocio Celec Coca-Codo Sinclair, responsable de estos trabajos. Está previsto que entre el río Piedra Fina y el río Malo se construyan seis muros, informó Gonzalo Uquillas, gerente general de la Celec.

En este procedimiento se contará con el apoyo de maquinaria del Cuerpo de Ingenieros del Ejército, de la empresa Oleoductos de Crudos Pesados (OCP) Ecuador y del Gobierno Autónomo Provincial de Napo. También se hará la ampliación del cauce del Coca. Estos trabajos considerados inmediatos son parte de la primera fase de intervención que se harán en este afluente, informó la semana anterior el Ministerio de Energía y Recursos Naturales no Renovables. Más adelante está planificado realizar más estudios para proponer obras de protección definitivas. Además, se continuará con el monitoreo diario del avance de la erosión para alertar sobre posibles represamientos en el río por los frecuentes deslaves que se registran en sus costados. Según el reporte de este 16 de julio del 2020, el proceso de erosión regresiva ha avanzado ya 5,1 kilómetros, tomando como punto de inició la desaparecida cascada San Rafael. Actualmente, se encuentra a la altura del río Piedra Fina, informó la Celec. Mientras tanto, la erosión avanza por un costado del río y a medida que se dirige aguas hacia arriba el tamaño de la cascada pierde altura. Este 15 de julio, hasta el sector de Piedra Fina llegó con una caída de ocho metros, precisó la Celec.

Fuente informativa El Comercio