El hallazgo del cadáver ocurrió en el segundo piso de una vivienda de construcción mixta ubicada en la calle 47 del sector Las Vegas de la parroquia Crucita, de Portoviejo, donde él habitaba solo.
Los vecinos de Alvarado manifestaron que este tenía varios días que no se aparecía por el lugar, pero no se preocuparon porque como era oriundo del centro de Portoviejo, en ocasiones se iba a pasar donde sus familiares.
DESAPARICIÓN. Uno de los vecinos comentó que tenía confianza con Alvarado y este le había pedido que cuando no estuviera en la casa le diera de comer a sus gallinas y pollos, por lo que en varias ocasiones ingresó a la propiedad, pero nunca se percató de nada extraño, ya que él no iba al segundo piso de la vivienda, sino que solo llegaba hasta el patio.
Los vecinos dijeron que semanas antes los familiares de Alvarado los habían llamado para preguntar por su allegado y nadie supo de su paradero, por lo que les recomendaron denunciarlo como desaparecido.
Los vecinos dijeron que los familiares estuvieron rodeando la casa de Alvarado y no se dieron cuenta de nada extraño.
“No había ningún mal olor, nada anormal que hiciera presumir que había muerto”, expresó uno de los moradores.
Ellos explicaron que ayer aproximadamente a las 17h00, la Policía llegó a la vivienda y luego de una revisión lograron abrir la puerta y hallar el cadáver en estado de descomposición.
Los agentes manifestaron que el cuerpo se encontraba hinchado y tuvo que ser trasladado al centro forense de Manta para que le realizaran la autopsia y se determinara lo que causó la muerte de Alvarado.
Fuente Informativa El Diario