Desde los dos frentes en conflicto, por el resultado de las elecciones presidenciales, se lanzaron convocatorias a marchas. La Unión Europea se suma a las observaciones al proceso, mientras el gobierno pide una auditoría a la OEA. Un día después de las violentas protestas en nueve departamentos de Bolivia por cuestionamientos al recuento electoral, oficialistas y opositores convocaron a nuevas movilizaciones. Esta medición de fuerzas avivó la tensión en el país y despertó la preocupación de la Organización de Naciones Unidas (ONU) y de la Organización de Estados Americanos (OEA). En el primer caso, el portavoz de la ONU, Stéphane Dujarric, publicó un mensaje en la red social Twitter en el que pide que se sigan de cerca los acontecimientos en Bolivia e invoca a los grupos enfrentados a evitar acciones de violencia. La OEA, por su parte, convocó para hoy a una sesión extraordinaria para considerar la situación en Bolivia. La reunión fue solicitada por los representantes de Brasil, Canadá, Colombia, Estados Unidos y Venezuela. La jornada comenzó con un recuento de los destrozos que dejaron las protestas la noche del lunes en los nueve departamentos, entre ellos la quema de las dependencias de los tribunales departamentales electorales en Chuquisaca, Potosí, Beni y Pando. Posteriormente llegaron las convocatorias a movilización de uno y otro lado, los frentes progubernamentales alentaron a defender la victoria del presidente Evo Morales en primera vuelta y los opositores en defensa de la segunda vuelta. Lo hicieron sin esperar a que concluya el recuento oficial de los votos. El recuento oficial con el 89,68 % del escrutinio da a Morales el 45,05 % de los votos y el 38,35% a Mesa. A primera hora de la mañana Morales se reunió con los dirigentes de la Coordinadora Nacional por el Cambio (Conade), quienes luego anunciaron una vigilia permanente en defensa de la victoria del Jefe de Estado y candidato por el Movimiento Al Socialismo (MAS). Convocaron para hoy a una concentración en la plaza San Francisco de La Paz. Poco después el opositor Consejo Nacional de Defensa de la Democracia (Conade) ofreció una conferencia de prensa en La Paz, donde sus principales dirigentes convocaron a un paro nacional indefinido desde hoy hasta que se oficialice la segunda vuelta electoral entre Morales y el expresidente Carlos Mesa, candidato de la alianza Comunidad Ciudadana (CC). El exdefensor del Pueblo y miembro de esta organización, Rolando Villena, anunció además que se solicitarán medidas cautelares a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ante la situación que se vive en el país. A la vez, la UE se sumó a las observaciones al proceso de recuento, mediante un comunicado en el que hace conocer que “la inesperada interrupción del conteo electrónico de votos después de la primera vuelta de las elecciones generales en Bolivia ha generado serias dudas que deben ser totalmente aclaradas de manera inmediataâ€�. Ante ello, el Gobierno llamó a la OEA a que realice una auditoría del proceso y los vocales del TSE anunciaron que sus puertas se encuentran abiertas para ello. (I)  

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