José calma la sed de muchos ciudadanos con agua de coco en Pedernales

Este personaje, de 58 años,  tiene una especie de triciclo en el que vende agua de coco. Indica que de acuerdo al pedido de sus clientes, también les entrega la carne que esta fruta tiene dentro.Cuenta que desde hace siete años se dedica a  este trabajo.Antes, asegura que también laboró vendiendo jugos de naranja en las calles de Pedernales.Comenta que el coco es una fruta que está presente durante todo el año.“A pesar de que hay mucha competencia, no pienso dejar esta actividad, la cual me deja ganancias que me permiten subsistir con su familia”, dice el emprendedor.Afirma que la ventaja de ser su propio jefe es que cuando le da la gana trabaja y cuando no, simplemente se queda descansando.José indica que nació en San Plácido, de Portoviejo, pero hace 25 años llegó junto con su esposa a Pedernales, en donde tuvieron tres hijos.Dice que, previamente,  por algunos años recorrió algunas ciudades del país en busca de una mejor vida.Comenta que pudo construir una casa, que resultó afectada por el terremoto.A pesar de los problemas que ha tenido en la vida, José dice que siempre se mantiene optimista.Ahora la finalidad de este personaje es que sus hijos sean profesionales para que no sufran lo mismo que él.Sus clientes lo conocen como el “coquero” o el “flaco”, aunque prefiere que le digan el último apelativo.En él está vivo el deseo de seguir vendiendo agua de coco, pues dice que el sol sale para todos y la gente siempre tendrá sed. Menciona que seguirá en este negocio hasta cuando Dios quiera.

EL DIARIO