Aguajes asustan a sector turístico

En realidad, la mayoría de habitantes de la parroquia Crucita no pudieron dormir ayer, pues el aguaje y el oleaje que se presentaron de forma agresiva causaron que el agua del mar y la arena se metieran a casas, restaurantes y condominios, situación que preocupa al sector turístico.Los moradores manifestaron que la situación crítica empezó a partir de la medianoche, cuando el nivel del mar subió tanto que todo parecía una piscina, dijo Juan Pazmiño, quien agregó que es común que se presenten los aguajes, pero señaló que ahora se sumó el oleaje, es decir olas fuertes y grandes que reventaban a la altura del malecón. DAÑOS. Dos restaurantes reportaron daños en neveras y una docena en artefactos menores, además de la inundación de sus locales.Mauricio Rodríguez señaló que aunque ha puesto muros de protección alrededor del restaurante, esta vez las olas fueron más agresivas y el agua se metió hasta la cocina.En el condominio Costa Real las personas colocaron sacos con arena como muro de protección, aún así la tienda de la parte baja sufrió los embates de la naturaleza.José Mendieta, morador de 81 años, dijo que los aguajes son algo común en esta y todas las playas y que suceden cada 15 días, sin embargo mencionó que estos recientes han sido más agresivos. Recordó que en Navidad pasó algo similar y explicó que se debe al invierno, pues en esta temporada llega mucha más agua de los ríos al océano, “entonces ese volumen golpea más fuerte”, dijo respaldado por su experiencia.Dalton Andrade, director de Gestión de Riesgos del Municipio de Portoviejo, señaló que la tarde del miércoles las olas más altas llegaron hasta 1,80 metros de altura.Agregó que desde la madrugada empezaron la limpieza del malecón con tres brigadas que incluyeron volquetes y tractores. Señaló que más de 30 volquetadas de arena fueron retiradas. También recibieron el apoyo de los bomberos, que están colaborando en la emergenciaAdemás dijo que se formaron muros para disipar la fuerza del mar.Antonio Palma, servidor turístico, señaló que ya es hora que en el balneario se construya un malecón que sirva de protección a los locales, pues mencionó que este tipo de eventos naturales además de causar daños a los locales también aleja a los turistas.Personal que labora en la construcción del muelle afirmó que éste no sufrió daños.
EL DIARIO