Los rostros del correato van dejando el gabinete de Lenín Moreno
Las causas han sido diversas: destitución por reemplazo o por procesamiento penal como en el caso del exvicepresidente Jorge Glas, renuncia voluntaria por diferencias políticas o por simple reemplazo.
Durante el año y medio de gestión, esta es la segunda ocasión en la que Moreno pide la renuncia a todos los ministros. La primera la hizo días antes de cumplir un año de gobierno, el 9 de mayo de este año.
En ese momento, Juan Sebastián Roldán, secretario particular del presidente, dijo que el objetivo era evaluar a cada funcionario, con criterios de gestión y rol político.
El segundo pedido de renuncia al gabinete se anunció luego de la dimisión de Fander Falconí al Ministerio de Educación, con críticas a la proforma presupuestaria 2019 por la reducción de recursos para la educación. Falconí fue titular de la Secretaría de Planificación en el gobierno de Correa.
El argumento del Gobierno también fue una “evaluación”, que durará hasta finales de año y de la que solo se han salvado, hasta el momento, Richard Martínez, ministro de Economía, y José Valencia, canciller, quienes fueron ratificados pocos días después del anuncio.
Antes de Falconí se fue también por voluntad propia, en agosto de este año, quien fue el nexo entre el bloque de AP y el gobierno de Correa, en la Constituyente del 2008: Augusto Barrera. Y lo hizo diciendo que “el entorno del presidente (Moreno) se modificó”.
Falconí y Barrera no han sido los únicos que salieron mostrando alguna inconformidad. Tres meses después de instalado el gobierno de Moreno renunciaron tres funcionarios que también fueron cabezas claves en la época de Correa: Virgilio Hérnandez, Ricardo Patiño y Paola Pabón.
“Nuestra postura como militantes nos obliga a dejar nuestra función en este Gobierno”, dijo entonces Pabón, postura que marcó la ruptura de AP y del bloque legislativo en correístas y morenistas.
Quiénes permanecen
De la época de Correa, aún permanecen personajes como Paúl Granda, delegado del Ejecutivo en el IESS; Verónica Espinosa, ministra de Salud; y Lorena Tapia, principal autoridad en Galápagos.
Pabel Muñoz, actual asambleísta correísta, expresó que el Gobierno, más que “descorreizarse”, se “derechizó” hace mucho tiempo y que esto se refleja en los cambios y en las leyes económicas urgentes enviadas y en la proforma 2019.
Muñoz critica el rol de excorreístas que antes de salir del actual gobierno hicieron “mutis por el foro” cuando Moreno cuestionó la construcción de las escuelas del milenio o los grandes hospitales. “Se dedicaron básicamente es a hablar mal de todos los sectores…”.
Otros como Miguel Carvajal, Diego Martínez, Patricio Rivera y Rosana Alvarado, exfuncionarios de Correa, salieron en silencio del actual régimen.
Ximena Peña, asambleísta que se alineó con Moreno, señala que hay “preocupación” por los pocos compañeros del movimiento en el gabinete; pero considera que la renovación puede ser positiva. “No se puede decir que porque están personas de otros sectores es un gobierno de derecha”. (I)
Renuncia Vicepresidenta excorreísta
María Alejandra Vicuña se convirtió en el último rostro de los exfuncionarios de Rafael Correa que deja el gobierno de Lenín Moreno. Ella renunció al cargo de vicepresidenta en medio de una investigación por cobros supuestamente indebidos cuando fue asambleísta.
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